Uno de los mejores hábitos que puedes aportar a tu piel es la rutina de limpieza. Al hacerlo, estarás retirando células muertas y en consecuencia, aportando brillo y vitalidad a la piel.
Es cierto que el cansancio nos invade cada noche y pensamos; "Bueno, hoy me lo hago de cualquier manera...o directamente, no lo hago". Pero la piel no olvida y lo mismo que se nota una piel cuidada día tras día, también se nota una piel descuidada. Un cutis que acumula suciedad noche tras noche se acaba convirtiendo en un cutis apagado, envejecido y gris.
Es muy importante realizar una limpieza facial cada mañana y cada noche. La importancia de la limpieza facial no es otra que la de evitar el envejecimiento prematuro. Esto, solo puede conseguirse eliminando las células muertas cada día. Además, no solo limpiamos nuestro cutis para eliminar las células muertas, sino para eliminar la suciedad que se adhiere a nuestra piel a diario por el simple hecho de salir a la calle. En las ciudades hay mucha contaminación, y esto, se traduce en suciedad para nuestra piel.
¿Como hacer una limpieza facial? Por la mañana bastaría limpiarla con el Limpiador facial y a continuación, pasar un algodón empapado en el Toner facial.
Por la noche la limpieza ha de ser más meticulosa, puesto que hay suciedad acumulada. Empieza con un producto con base oleosa, como el Eco basic oil, masajea por todas las zonas, moja la muselina en agua tibia y retira el producto. Prosigue con el Limpiador facialacial y acaba con el Toner facial.
Piel limpia y sana. Preparada para que a continuación le regales un banquete con productos orgánicos, con alta concentración de activos.
Tu piel adquirirá un brillo sano, sin máscaras. Presume de piel.
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